Dijo Andrés Manuel López Obrador este martes en Pachuca que «es muy dificil» que su MORENA no se inflitre por elementos del PRI o el PAN, sin decir que ya lo está por el PRD, que a su vez está infiltrado por priístas, panistas, sinarquistas, salinistas, anti comunistas, fascistas, trotskystas y reguetoneros, que no es poca cosa.

Quizá por eso el ahora constituido MORENA Hidalgo quedó dirigido por un profesor de nombre Andrés Caballero, ni más ni menos que colaborador del ex senador perredista y ex priísta, José Guadarrama Márquez, quien, entre otras cosas, fue señalado publicamente por haberse involucrado en el desfalco del Pemexgate  como Secretario de Organización del PRI nacional y acusado en el expediente 75/1991 por la CNDH del fallecido Jorge Carpizo McGregor por el asesinato de cuando menos tres opositores en 1991.

Caballero se inició con Guadarrama como su operador político en el Valle del Mezquital cuando éste buscó la gubernatura de Hidalgo en el año 2005 como candidato externo del PRD, y se hizo  famoso gracias a sus presentaciones llenas de enjundia y tono de combate, por cada plaza en la que su entonces  candidato se presentaba. Y así lo siguió hasta que el ex priísta logró colocarse como  enador un año después de la mano propagandística del «Rayo de esperanza».

Y así va luciendo MORENA en todo el país, en medio de protestas de imposición de personajes arrogados como ‘obradoristas’ en contra de los que a sí mismo se arrogan el obradorismo. Así en Hidalgo como en Zacatecas donde la familia Monreal ya se adjudicó su estructura, no sin antes haberse conformado con la del PRI, la del PRD, la del PT;  o en el Distrito Federal donde un oportunista en cada  un moreno te dió, gracias a las corrientes bejaranistas  y otras recientes creaciones amorosas estatales de famlia tricolor Bartlett o Blásquez Salinas, actual senador bajacaliforniano por cuyas venas corre su amistad con Jorge Hank Rhon, peñanietista de hueso muy colorado.

Con todo lo anterior, al menos no se le puede acusar a López Obrador de mentir; acaso, de quedarse corto en el análisis. MORENA no sólo está infiltrado de priístas: está lleno hasta sus cúpulas.